2 Nefi 4: 17
Ver. 17 Sin embargo, a pesar de la gran bondad del Señor al mostrarme sus grandes y maravillosas obras, mi corazón exclama: ¡Oh, miserable hombre que soy!. Sí, mi corazón se entristece a causa de mi carne. Mi alma se aflige a causa de mis iniquidades.
Ver. 19. Y cuando deseo regocijarme, mi corazón gime a causa de mis pecados; no obstante, sé en quien he confiado.
Ver. 20. Mi Dios ha sido mi apoyo; él me ha guiado por entre mis aflicciones en el desierto; y me ha preservado sobre las aguas del gran mar.
Ver 30. ¡Regocíjate, oh mi corazón, y clama al Señor y dile: Oh Señor, te alabaré para siempre!. Sí, mi alma se regocijará en ti, mi Dios, y la roca de mi salvación.
martes, 27 de enero de 2009
"Sigamos adelante a pesar de nuestras debilidades"
Publicado por compartiendo el evangelio en 6:44:00 p. m.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario